sábado, 14 de septiembre de 2013

En el revés de sus vestidos

Si una de estas noche oso robar un beso
que sea de la boca plata que me ilumina
de la compañera que me inspira al sueño
y que me contempla desde sí, indiferente. 

En el revés de sus vestidos, por el debajo 
le he labrado a besos en sus oscuridades
y le he dibujado alguna noche una sonrisa
contentos los amantes de ser bendecidos. 


Ella ha mostrado en la piel de su desnudez
la gama completa de mis tristezas lloradas
y he adornado sus gestos con mis lágrimas
sabiendo ella lucirlas por ser sus preferidas.

Le he donado mis secretos y mis angustias
para que ella zurza las flores de mis sueños
en el costado fino de sus noches de plenitud.
Ella me ha sabido el verso de mis silencios.