En este juego
del te busco y me buscas
somos ambos los dos
del aburrimiento
sombras en franca huida
del desencuentro.
Desvelos que acechan amaneceres
entres las caricias que gota a gota
nos llueven y mojan de a poco... todo.
Paredes
balcones
y zaguanes que nos imantan
que nos descubren
bajo el neón de las callejuelas
de inenarrables madrugadas
entre los besos ciegos
y los tanteos (e)videntes.