Te busco todavía

¡Qué desgarro tan fiero 
esta soledad de no tenerte!
Este despertar adolorido 
de tantas ausencias en los huesos
de tanta necesidad de encuentro. 

Pero te busqué, no creas que no...
Te busqué en este otro sueño 
que empieza
cuando no queda otro sueño 
sino abrir los ojos al nuevo día.

Es tan grande y abierta la herida
que ya solo me quedan
las últimas gotas. Mi sangre se ha ido.
Me brota solo esta nada
de tan herido que ando por esta vida.

¿Cuántas promesas rotas
nos quedan todavía? No lo sé...
Solo me vierto a cántaro herido
a fuentes áridas del abandono
a plaza sola, desnuda contra los vientos.

Pero te busqué, no creas que no...
Te busqué a ríos entre las manos
a desiertos despoblados te busqué.
Te busqué en el milagro de estar vivo
en la sonrisa del niño...
de viejo te busqué.

Te busqué
te busqué
te busqué y no te encontré.
Te busco todavía
aunque no existas
te busco todavía.